lunes, 12 de marzo de 2007

Lanzamiento de un cohete de agua

¿Cabo Cañaveral? No, es el parque El Majuelo...


17:30h - El joven equipo de astronautas rinconeros llega al parque El Majuelo y prepara todo lo necesario: plataforma de lanzamiento, cohete, aspersor manual de agua, bomba de aire... ¡Vamos a lanzar un cohete al espacio!
 

17:35h - Se comprueba la seguridad del montaje del cohete. Su sistema de sujección está a punto...


 
17:40h - La seguridad en el lanzamiento es primordial. Se verifica la correcta conexión del aspersor de agua y de la bomba de aire. Todo listo.



 17:45h - Se inicia la carga del carburante (agua) accionando el mando del aspersor hasta alcanzar la cantidad prevista (1/3 de la botella).


 
17:50h - Se cierra la llave de paso del carburante y se purga el conducto, sacando todo el agua y aire sobrantes.


 
17:55h - Uno de los "ingenieros" procede a bombear aire por el mismo conducto usado para introducir el agua, hasta alcanzar el volumen previsto...
 


17:57h - En breve, comenzará la cuenta atrás para el lanzamiento. ¡Todos a sus puestos! Cuando reciban la orden tirarán de los cordeles para liberar la nave.


 
17h58 - El supervisor del lanzamiento se prapara también...


 
 
17:59:50 - Ayudado de un cuadrante y a una distancia de 20 metros, se dispone a calcular la altura que alcanzará el cohete. Comienza la cuenta atrás: diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno...

 

18:00 - El cohete sale propulsado al espacio... a la hora acordada. ¡Aquí somos puntuales!


 
18:00 Sube, sube... cohetito...


 
 
18:00 - Y ahora baja, baja...

 
18:00 - That's incredible!


 
 
18:00 - ¡El lanzamiento ha sido un éxito! ¿Repetimos?

La tercera ley de Newton, también conocida como Principio de acción y reacción nos dice que si un cuerpo A ejerce una acción sobre otro cuerpo B, éste realiza sobre A otra acción igual y de sentido contrario.

Esto es algo que podemos comprobar a diario en numerosas ocasiones. Por ejemplo, cuando queremos dar un salto hacia arriba, empujamos el suelo para impulsarnos. La reacción del suelo es la que nos hace saltar hacia arriba.

Cuando estamos en una piscina y empujamos a alguien, nosotros también nos movemos en sentido contrario. Esto se debe a la reacción que la otra persona hace sobre nosotros, aunque no haga el intento de empujarnos a nosotros.

Hay que destacar que, aunque los pares de acción y reacción tengan el mismo valor y sentidos contrarios, no se anulan entre si, puesto que actúan sobre cuerpos distintos.