sábado, 1 de septiembre de 2007

Bacterias más virulentas en el espacio

Un equipo científico comprobó que las bacterias en el espacio pueden volverse más virulentas.

Un cultivo de la bacteria Salmonella Typhimurium transportado al espacio en recipientes herméticos, desarrolló una virulencia tres veces superior a la del cultivo de control en la Tierra, capaz de matar ratones infectados.

Salmonella

Se considera que el estudio -presentado en Proceedings of the National Academy of Sciences- tiene implicaciones importantes para los astronautas que viajan a la Luna o a Marte.

La Salmonella del tipo Typhimuriun se encuentra con frecuencia en el pollo y los huevos, y es la causa más común del envenenamiento de alimentos.

La enfermedad produce síntomas como diarrea, dolor abdominal, vómito y náuseas.
La Salmonella typhimurium es una de las bacterias más difíciles de tratar con antibióticos y en las misiones espaciales de larga duración podría necesitarse un redoblamiento de los estándares de higiene.

La astronauta Heide Stefanyshyn-Pipe de la NASA realizó el estudio, bajo la dirección de Instituto de Biodiseño de la Universidad estatal de Arizona.

Su equipo de trabajo afirma que la bacteria cambió en el espacio, en respuesta a las condiciones de microgravedad que experimentaron en el vuelo orbital de 12 días del trasbordador Atlantis, en 2006.

Los microbios parecen tener la capacidad de cambiar su maquinaria genética cuando cambian sus condiciones ambientales.

El equipo de investigación descubrió que un amplio número de cambios genéticos de la bacteria, al parecer están regulados por una proteína conocida como Hfq.

El grupo dice que una medicina desarrollada para atacar el Hfq podría ayudar a proteger a los astronautas de enfermedades infecciosas durante viajes espaciales, y también a los humanos en tierra.

En la actualidad no existe una vacuna para atacar la Salmonella en humanos.

El experimento también mostró que las bacterias más agresivas forman una capa protectora que las hace más resistentes, lo que podría explicar por qué la Salmonella se muestra tan resistente a los antibióticos. Fuente: BBC Mundo.